SINOPSIS.
El relato comienza con un viaje, el cumplimiento de una promesa, con un protagonista ausente. Pero el viaje verdadero había comenzado mucho antes. El viaje compartido por Aki y Sakutaro, el narrador. Sakutaro, el típico adolescente, un poco gamberro. Aki, la típica chica coqueta, admirada y a la vez odiada entre sus compañeras, una rompecorazones para sus compañeros de instituto. Pero su historia no es típica. Juntos dan el paso y dejan atrás la realidad superficial que les rodea y conforman un universo de dos. Un primer beso, la picaresca juvenil para eludir la estrecha vigilancia paterna, la primera noche juntos… Ese primer amor que parece que va a durar para siempre. Pero, ¿Qué puede pasar cuando la mitad de ese universo está irremediablemente condenada a desaparecer?¿Qué queda?.
CRÍTICA.
Una conmovedora historia, narrada con un lirismo único. Como es común en la escritura nipona, la naturaleza y el ambiente son un personaje más. El relato nos revela a universalidad del primer amor vista desde la peculiaridad de la cultura japonesa. Con un protocolo un tanto “especial” a la hora de formalizar y hablar las relaciones sentimentales, eso si. Aunque repito, cualquiera se puede sentir identificado con la inocencia y la torpeza primeriza de sus protagonistas. Como corresponde a la mentalidad adolescente, los pensamientos profundos y existenciales se mezclan con la líbido de una manera realista. En particular, resulta original la relación del protagonista con su abuelo: Un hombre que está a punto de abandonar este mundo y un joven que está empezando a vivirlo. Pese a ser distante en un principio, Sakutaro comienza a plantearse gracias a él qué significa realmente estar enamorado, qué es verdad y qué es mentira en las relaciones adultas... Interrogantes que todos nos hemos planteado. Para averiguar realmente si Sakutaro encuentra la o las respuestas, habrá que leer el libro. Entre tanto, para abrir boca reproducimos el siguiente fragmento en el que se aprecian las diferencias entre lo que le preocupa a Aki y lo que “de verdad” preocupa a Sakutaro en una cita.
“El zoológico era como todos los zoológicos. El león dormía, el cerdo hormiguero estaba rebozado en lodo y el oso hormiguero comía hormigas. El elefante iba de un lado para otro en el interior de su reducto soltando defecaciones enormes, el hipopótamo bostezaba como un bobalicón dentro del agua, la jirafa alargaba el cuello y se comía las hojas de los árboles observándonos desde las alturas. Aki estaba fascinada por los animales y se escurría entre la gente que se agolpaba ante las jaulas. Ante un lémur decía: “¡Mira. Mira lo hábil que es usando la cola!” Llamaba a la iguana de su caja de cristal diciéndole: “¡Eh!¡Ven aquí!”
¿Dónde está la gracia de pagar por ver jirafas y leones? Un zoológico apesta eso es todo. Yo sentía un gran interés por la preservación de la naturaleza y los problemas medioambientales, pero eso no quería decir que fuera naturista o ecologista. Yo quería vivir feliz con Aki. Y, para ello, quería preservar la vegetación y la capa de ozono. Sólo eso. Simpatizaba con las ideas de protección de los animales, pero era más porque me enfurecía la arbitrariedad y la arrogancia de los seres humanos que matan y maltratan a los animales que porque me compadeciera de éstos. Aki lo interpretaba de manera errónea y me tenía por un dulce amante de la fauna. Por eso me había dicho: “¡Saku-chan! ¡Vayamos al zoo estos días de fiesta!¡Al zoo!”. Pues está muy equivocada si se cree que me entusiasma ver un mapache o una pitón. Preferiría que me dejara besarla o tocarle los pechos, como mínimo...pensé yo. Claro que no dije nada. Porque me daba vergüenza.”
Aviso a navegantes. Adelanto que Aki no es tan “inocente” como pudiera parecer en estas líneas y que aunque este fragmento haya despertado alguna que otra sonrisa, se advierte a las personas sensibles que tengan pañuelo a mano durante la lectura.
VALORACIÓN. Un 8. Es un libro más que recomendable para todo aquél que haya experimentado el primer amor... o que todavía lo tenga pendiente. A disfrutar también por aquellos fans de Moccia que se conmovieron con “A tres metros sobre el cielo”. Es una lectura muy amena, a un precio más que asequible en su formato bolsillo (la editorial Punto de lectura lo ha editado al irrisorio precio de 6€, gracias!!)
RESEÑA REALIZADA POR EVA.
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