UN MUNDO INVERTIDO, de CHRISTOPHER PRIEST
LA FACTORIA DE IDEAS
Lengua: CASTELLANO
Encuadernación: Tapa blanda
ISBN: 9788498006391
Nº Edición:1ª
Año de edición:2010
Plaza edición: MADRID
SINOPSIS
La ciudad avanza por medio de raíles, surcando una tierra devastada llena de tribus hostiles. Los raíles deben ir colocándose delante de ella al tiempo que se progresa y ser retirados cuidadosamente tras su estela. Los ríos y las montañas suponen un obstáculo casi insalvable para el ingenio de los técnicos de la ciudad. Pero si se detiene su movimiento, la ciudad va cayendo en el campo gravitacional destructor que ha transformado la vida en la Tierra. La única alternativa al progreso es la muerte.
Helward Mann, un miembro de la élite de la ciudad, sabe mejor que nadie que su existencia pende de un hilo: está a punto de descubrir que el mundo exterior es infinitamente más extraño que su propio entorno, que tan bien cree conocer.
CRÍTICA
La ciencia ficción es un género clasificado por los expertos como de "segunda fila", algo extraño de entender, al tratarse de un género con millones de seguidores y que cuenta con algunos de los mejores títulos y autores que ha dado la literatura.
Lo que nos gusta de este género es que nos permite ver mundos futuros o paralelos al nuestro, desarrollados con la simple teoría de "que pasaría si...", lo que hace que pensemos hacia donde nos dirigimos, como podríamos ser dentro de veinte o cincuenta años y que mundo podría ser el que nos esperará en breve...
En "Un mundo invertido", Christopher Priest nos lleva a un futuro no tan lejano, en el que nuestras vidas se cuentan por los kilómetros que ha recorrido "Tierra", una ciudad en constante movimiento que tiene que evitar quedarse parada para no ser engullida por la gravedad del planeta. Nadie sale de la ciudad, salvo los trabajadores de los gremios, encargados de la seguridad, de la construcción y del mantenimiento de los raíles por donde se transporta la ciudad, o de la exploración del terreno futuro todavía por surcar. La gente de la ciudad nunca ha visto un amanecer, nunca ha visto el sol, ni siquiera el terreno por donde pasan, la gente de la ciudad tiene miedo a lo que hay fuera...
Con este paradigma, Priest nos lleva a una sociedad sometida al miedo a lo desconocido, un miedo promulgado por un grupo minoritario de "elegidos" que dirigen la ciudad y que trabajan en los gremios que mantienen y cuidan la enorme maquinaria que es "Tierra". Usando un ritmo bastante rápido en el desarrollo de la trama, el autor nos va metiendo poco a poco dentro de la mentalidad de los habitantes de esta enorme ciudad en movimiento, una mentalidad carente de iniciativa propia, de curiosidad por lo desconocido, una mentalidad subyugada a una vida ya preparada desde el nacimiento... una vida que parece más una condena que una vida en libertad.
A través de Helward Mann, el autor nos va narrando el desarrollo de la vida dentro de la ciudad, curiosamente, con un personaje que termina siendo escogido para trabajar en los gremios, el cuerpo de élite... a través de sus ojos vamos viendo una sociedad que aceptamos sin más, que no esperamos que sea diferente a lo que nos muestra el autor. El protagonista nos contagia su miedo al exterior, su miedo a lo desconocido que le han enseñado desde niño, y lo hace de tal manera, que terminamos pensando como ellos y aceptando que son los únicos supervivientes a la terrible crueldad de la gravedad del planeta...
Y en realidad te lo vas creyendo todo hasta que uno se da cuenta de que fuera de "Tierra" vive gente, tribus dispersadas sumidas en la más profunda pobreza, pero que son como los habitantes de la ciudad, mismo físico y mismo origen, aunque estos los consideren hostiles y peligrosos... y es ahí cuando el lector debe empezar a sospechar de "Tierra" y de todo lo que el escritor nos ha ido contando desde el principio... ¿Son en realidad los únicos supervivientes?, ¿Por qué hay entonces gente que puede vivir en el exterior?, ¿Por qué atacan a la ciudad a la menor ocasión?... muchas preguntas van surgiendo conforme vamos pasando páginas y nos vamos sumergiendo y enganchando cada vez más a una historia increíble, en lo que todo parece ser una cosa, y luego puede ser otra, o ser lo que realmente nos está contando el autor. Una historia que no es otra cosa que una metáfora de la sociedad actual que tenemos, y en lo que podría convertirse, una crítica brutal al mito de la segregación y la supervivencia, una llamada de atención al pensamiento sectario que nos va persiguiendo con el paso de los años.
En resumen, excelente libro de ciencia ficción el que nos presenta la editorial FACTORIA DE IDEAS, rápido de leer, muy bien narrado, y con una historia que te lleva a un final del todo insospechado, que deja al lector bastante impresionado, y con la clásica duda típica de este género, de "que pasaría si...."
Atención a la portada escogida, excelente para dar una idea de la historia tan espectacular que nos van a contar...
PUNTUACIÓN: 8. "Tierra" nos termina dando miedo... que nunca se apague la curiosidad del hombre.
LA FACTORIA DE IDEAS
Lengua: CASTELLANO
Encuadernación: Tapa blanda
ISBN: 9788498006391
Nº Edición:1ª
Año de edición:2010
Plaza edición: MADRID
SINOPSIS
La ciudad avanza por medio de raíles, surcando una tierra devastada llena de tribus hostiles. Los raíles deben ir colocándose delante de ella al tiempo que se progresa y ser retirados cuidadosamente tras su estela. Los ríos y las montañas suponen un obstáculo casi insalvable para el ingenio de los técnicos de la ciudad. Pero si se detiene su movimiento, la ciudad va cayendo en el campo gravitacional destructor que ha transformado la vida en la Tierra. La única alternativa al progreso es la muerte.
Helward Mann, un miembro de la élite de la ciudad, sabe mejor que nadie que su existencia pende de un hilo: está a punto de descubrir que el mundo exterior es infinitamente más extraño que su propio entorno, que tan bien cree conocer.
CRÍTICA
La ciencia ficción es un género clasificado por los expertos como de "segunda fila", algo extraño de entender, al tratarse de un género con millones de seguidores y que cuenta con algunos de los mejores títulos y autores que ha dado la literatura.
Lo que nos gusta de este género es que nos permite ver mundos futuros o paralelos al nuestro, desarrollados con la simple teoría de "que pasaría si...", lo que hace que pensemos hacia donde nos dirigimos, como podríamos ser dentro de veinte o cincuenta años y que mundo podría ser el que nos esperará en breve...
En "Un mundo invertido", Christopher Priest nos lleva a un futuro no tan lejano, en el que nuestras vidas se cuentan por los kilómetros que ha recorrido "Tierra", una ciudad en constante movimiento que tiene que evitar quedarse parada para no ser engullida por la gravedad del planeta. Nadie sale de la ciudad, salvo los trabajadores de los gremios, encargados de la seguridad, de la construcción y del mantenimiento de los raíles por donde se transporta la ciudad, o de la exploración del terreno futuro todavía por surcar. La gente de la ciudad nunca ha visto un amanecer, nunca ha visto el sol, ni siquiera el terreno por donde pasan, la gente de la ciudad tiene miedo a lo que hay fuera...
Con este paradigma, Priest nos lleva a una sociedad sometida al miedo a lo desconocido, un miedo promulgado por un grupo minoritario de "elegidos" que dirigen la ciudad y que trabajan en los gremios que mantienen y cuidan la enorme maquinaria que es "Tierra". Usando un ritmo bastante rápido en el desarrollo de la trama, el autor nos va metiendo poco a poco dentro de la mentalidad de los habitantes de esta enorme ciudad en movimiento, una mentalidad carente de iniciativa propia, de curiosidad por lo desconocido, una mentalidad subyugada a una vida ya preparada desde el nacimiento... una vida que parece más una condena que una vida en libertad.
A través de Helward Mann, el autor nos va narrando el desarrollo de la vida dentro de la ciudad, curiosamente, con un personaje que termina siendo escogido para trabajar en los gremios, el cuerpo de élite... a través de sus ojos vamos viendo una sociedad que aceptamos sin más, que no esperamos que sea diferente a lo que nos muestra el autor. El protagonista nos contagia su miedo al exterior, su miedo a lo desconocido que le han enseñado desde niño, y lo hace de tal manera, que terminamos pensando como ellos y aceptando que son los únicos supervivientes a la terrible crueldad de la gravedad del planeta...
Y en realidad te lo vas creyendo todo hasta que uno se da cuenta de que fuera de "Tierra" vive gente, tribus dispersadas sumidas en la más profunda pobreza, pero que son como los habitantes de la ciudad, mismo físico y mismo origen, aunque estos los consideren hostiles y peligrosos... y es ahí cuando el lector debe empezar a sospechar de "Tierra" y de todo lo que el escritor nos ha ido contando desde el principio... ¿Son en realidad los únicos supervivientes?, ¿Por qué hay entonces gente que puede vivir en el exterior?, ¿Por qué atacan a la ciudad a la menor ocasión?... muchas preguntas van surgiendo conforme vamos pasando páginas y nos vamos sumergiendo y enganchando cada vez más a una historia increíble, en lo que todo parece ser una cosa, y luego puede ser otra, o ser lo que realmente nos está contando el autor. Una historia que no es otra cosa que una metáfora de la sociedad actual que tenemos, y en lo que podría convertirse, una crítica brutal al mito de la segregación y la supervivencia, una llamada de atención al pensamiento sectario que nos va persiguiendo con el paso de los años.
En resumen, excelente libro de ciencia ficción el que nos presenta la editorial FACTORIA DE IDEAS, rápido de leer, muy bien narrado, y con una historia que te lleva a un final del todo insospechado, que deja al lector bastante impresionado, y con la clásica duda típica de este género, de "que pasaría si...."
Atención a la portada escogida, excelente para dar una idea de la historia tan espectacular que nos van a contar...
PUNTUACIÓN: 8. "Tierra" nos termina dando miedo... que nunca se apague la curiosidad del hombre.
RESEÑA REALIZADA POR SKADI
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