viernes, 30 de septiembre de 2011 | By: Skadhi

Robin Hood, el cruzado - Angus Donald




ROBIN HOOD, EL CRUZADO, de ANGUS DONALD
EDHASA

Nº páginas: 512 pags
Lengua: CASTELLANO
Encuadernación: Tapa dura
ISBN: 9788435062305
Nº Edición:1ª
Año de edición:2011
Plaza edición: BARCELONA

SINOPSIS

En el 1190 la épica cruzada que encabeza el célebre Ricardo Corazón de León para recuperar Jerusalén de manos de los sarracenos se encuentra en pleno apogeo. Entre sus nutridas y aguerridas huestes marcha el más famoso, temido y valiente guerrero de su tiempo, el conde de Locksley, o, lo que es lo mismo, Robin Hood. Acompañado de sus fieles y entrañables compañeros, el conde pone su astucia y su ímpetu guerrero al servicio de la lucha contra el infiel, pero lo que ni él ni nadie esperaba es que tuvieran que luchar también contra un enemigo oculto en sus propias filas, un infiltrado que pone en riesgo sus planes de ataque. La trama se desdobla así en una línea de acción bélica y otra de misterio e intriga, al tiempo que el autor sigue desarrollando a los personajes que acompañan a Robin Hood, particularmente Little John y el propio narrador.

CRÍTICA

Queda mal decirlo, y más en estos ambientes, pero no he leído mucha novela histórica a lo largo de mi vida. Últimamente estoy más por la evasión de la literatura de género que por la histórica. Está claro que algo sí que he leído, como por ejemplo “El Nombre de la Rosa”, que por cierto es posiblemente mi novela preferida, o las desventuras de Alatriste, pero se puede decir que pocos libros más. Por eso, me llamó mucho la atención cuando empecé con estos libros de Robin Hood, el estilo en el que están escritos. Es decir, de una novela histórica uno se espera multitud de datos reales, ausencia de errores, inmersión en la misma a través de los hechos ocurridos, descripciones sociales o incluso geopolíticas, etc. Casi como si fuera una lección de Historia, bien novelada o bien como fondo de otra historia.
    
Y sin embargo en estos libros, no. Estos escritos son novelas de aventuras de las de toda la vida pero a los que se les imbuye de un fondo histórico, más o menos trabajado, para que sirva de telón donde se desarrolle la historia principal. Es más o menos como las novelas de Alejandro Dumas (Los Tres Mosqueteros, por decir un ejemplo) o Emilio Salgari (la saga de El Capitán Tormenta por decir otro)  pero adaptado a la forma de escribir actual y sobre todo dándole más realismo a los personajes y situaciones y con la Historia con más peso. Casi como si dijéramos una evolución más adulta y realista de aquellas novelas con las que algunos nos solazábamos de niños (yo sigo haciéndolo, pero bueno, vivo en otro mundo).

En este segundo libro de las salvajes aventuras del famoso bandido inglés seguimos teniendo de protagonista y narrador al joven Alan, ahora convertido en trouvère personal de Hood, quien también ha ascendido. Gracias al final de la anterior novela, ahora es un conde, con todos los placeres y problemas que ello trae, casado con Marian y que en virtud de una promesa, tiene que preparar un pequeño ejército que se unirá a la Cruzada que  tiene prevista el rey Ricardo Corazón de León. Así mismo tendrá que hacer frente de nuevo a su rival, el antiguo sheriff de Nottingham y a unos intentos de asesinarle por parte de un misterioso personaje.
    
Ahora se aprecia una clara evolución del autor en su forma de escribir y nos presenta una novela de aventuras con un componente histórico más fuerte que en el anterior relato. Así, mientras antes utilizaba meros detalles y pequeñas descripciones de indumentaria, cortes de pelo y de armas y armaduras  para hacer ver al lector que la acción transcurría en épocas reales y en momentos concretos, ahora ya nos pone en situación explayándose un poco más en los hechos históricos que suceden paralelamente a la acción de la novela. Se ve que Angus Donald es un apasionado del período histórico en el que transcurre la acción y que maneja el tema y por ello no duda en novelizarnos y hacernos comprensibles algunos de los terribles sucesos que marcaron el final de la década de 1190. Además tampoco duda en soltar pequeñas prendas y detallitos que aunque no aportan mucho, como por ejemplo el hecho de que el sedicioso “emperador” de Chipre fuera cargado de cadenas de plata, ambientan aún más si cabe y contribuye a poner el toque ligero que toda narración histórica necesita.

También se nota su conocimiento en las descripciones de las luchas de las que está plagada la novela. El autor describe la forma de combatir y el equipamiento de las tropas con la suficiente precisión para imaginárnoslo pero sin caer en el tedio de la minuciosidad completa que sólo serviría para frenar la trama y que sólo resultaría de interés para aquellos a quienes gustan de la novelización de las batallas. Aquí sin embargo es donde quizá puede verse el que para mí es el pequeño error del libro. Y es que toda la acción transcurre en esas batallas.
    
De esta manera puede verse que la estructura del relato consiste en una especie de introducción y puesta al día de los lectores, el infame asedio al que sometió la población de York a sus judíos (con el trágico final de una resistencia numantina) en la actual Clifford´s Tower, un período de descanso en el que nos narra el pertrechamiento  y viaje de la Cruzada. A continuación otro momento de acción con la conquista de Messina, seguido de otro descanso. Viene ya otro acto de adrenalina con la expedición de castigo a Chipre y su emperador y ya el último respiro antes de embarcarnos en la gigantesca batalla final de Arsuf contra Saladino, en la que salió victorioso el contingente cristiano.
    
Como he dicho, casi toda la acción viene dada por las batallas y utiliza los períodos de descanso entre ellas, hábilmente disimulados, bien sea por convalecencias o por viajes o por mil motivos, para hacer avanzar la trama, presentar a nuevos personajes, tanto amigos como enemigos y plantearnos nuevos misterios, como las tentativas de asesinato hacia Robin. También aprovecha para contarnos una mini trama que ocurre en el presente en el que Alan cuenta la narración (ya viejo y decrépito) y en el que nos relata los pormenores de tener que dirigir una hacienda.
    
Y para mí es un pequeño error porque personalmente no me gusta la novelización de las batallas. Me aburre el hecho de imaginar qué flanco ataca de qué manera, cómo se distribuyen las tropas y la batalla en sí. Sin embargo es de reseñar que aunque el grueso de la acción transcurre en esos momentos, está narrado con la suficiente soltura y con la necesaria somera descripción de las mismas  que hace que discurran a toda velocidad, no enlenteciendo el transcurrir de la trama y dejándote con la sensación de un subidón de adrenalina. Creo que gustará a quienes gusten de la descripción de los actos bélicos, y a los que no, nos resultará muy agradable ya que no se entretiene en exceso en ellos.
    
El estilo sigue siendo el mismo, fluido y rápido, con ganas de empezar cada capítulo para seguir las andanzas de nuestros protagonistas y ver cómo resuelven los desafíos que plantean. También sigue presente la sangre y la carnaza tan características del primer libro, quizá aquí un poco agudizada, porque mientras que en las primeras aventuras los enfrentamientos eran más escasos y con menos presencia humana, aquí transcurre la acción en medio de una Cruzada, donde ni se daba ni se pedía cuartel. De todas maneras el lector encontrará que de nuevo el autor no se regodea en ello, se limita simplemente a enseñarnos lo cruento de la lucha.
    
Destaca así mismo la maduración y evolución del protagonista, con pequeña trama amorosa de por medio, en la que vemos cómo pasa el joven Alan de la adoración por el forajido al odio cuando descubre que su héroe no es quien a él le parecía. Y es que de nuevo vemos a un Robin Hood muy alejado de los cánones habituales. Se le presenta como un ser humano más y cuya casi única virtud es la lealtad hacia sus amigos y familia. A partir de ahí todo el mundo es prescindible y hará lo que sea para conseguir sus objetivos, sin importar lo egoísta, injusto o inmoral de sus acciones. A fin de cuentas aunque la mona se vista de seda, mona se queda, y no deja de ser Robin un bandido.
    
Parece que no termina aquí la saga de Robin Hood, pues prometen un tercer libro para verano de 2012. Tengo ganas de seguir la evolución del protagonista y ver cómo se van cerrando los hilos que Donald ha dejado abiertos.  Quién sabe, puede que asistamos a la caída en desgracia del conde de Locksley y su vuelta a los bosques de Sherwood. Sea como sea, de buen seguro yo estaré ahí para leerlo, y si sigue por este camino, os recomiendo a vosotros que también lo hagáis y así podamos disfrutar una vez más del placer de comer de la caza furtiva.

Mi nota: 7.5 Maduración de personajes, más hechos históricos, aventuras sin fin… ¿Qué más se puede pedir para una continuación?
 
Lo mejor: La evolución de los protagonistas. El pogromo de los judíos de York, mucha crudeza muy bien relatada.
 
Lo peor: Mucha batalla para mi gusto, pero por suerte, se hace liviana.

RESEÑA REALIZADA POR CARLOS

2 comentarios:

Shorby dijo...

Bien!!!
Así que ya hay segunda parte!!! Grrrrr!!
No leo la reseña para no tragarme spoilers =)

Besotes

El administrador de La novela antihistórica dijo...

Siento moderar sus entusiasmos, pero Angus Donald hace más trampas que un tahúr del Mississipi con sus novelas supuestamente históricas. La trama no es más realista que en las antiguas novelas "de aventuras". Es sólo unn disfraz. Donald es de los que nadan y guardan la ropa. Primero vender el libro, luego todo lo demás, incluido el rigor histórico que eso, por más que lo pretenda, no se lo va a dar el hablar de que había barro, mucho barro, en las calles medievales, una barbaridad de barro y otras cosas que parecen raras y "medievales" para el lector de hoy. Alan de Westbury y sus disquisiciones morales son más falsas que una moneda de cuatro euros. Alan, en realidad, debería pensar como otro de los personajes -este totalmente histórico- de la novela, el caballero trovador Bertrán de Born, y no como un pacifista del siglo XXI que se horroriza ante la sangre vertida, la lucha contra el Islám, etc... Todos los detalles en http://lanovelaantihistorica.wordpress.com de 20 de septiembre de 2012.

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